Después de varios años logré, finalmente, crear una formación en el exterior. Anteriormente lo había propuesto a diferentes personas. Algunas no estuvieron interesadas, otras no supieron como y otras querían hacerlo a su manera. Finalmente ante tantas situaciones, decidí llevarlo a cabo con mi amigo y colega de tantos años, Hernán Hueso. Junto a otras personas que se fueron sumando al proyecto y aportando cada uno desde su rol.
Hemos logrado el objetivo en número y forma.
Qué aprendí de esto?
Pues, que una vez mas, los obstáculos no son mas que un monstruo que nosotros mismos inventamos y alimentamos con nuestros pensamientos. Que nos paralizan y nos enojan hasta postergar o abandonar nuestros proyectos. Pero que también esos obstáculos y pensamientos podemos utilizarlos en nuestro beneficio como impulso hacia donde queremos dirigirnos. Para eso seguramente nos pondremos en contacto con nuestra creatividad y pondremos en marcha nuestro potencial.
Aprendí que es fundamental para llevar a cabo un proyecto, más allá de todos los mecanismos (que serán necesarios e imprescindibles para concretar efectivamente dicha meta), asumir una forma de actuar que nos permita concluir ese proyecto.
Y cuales son esas formas de actuar? Fundamentalmente desde una posición de COMPROMISO. Porque el compromiso abarca muchas otras maneras de actuar, como por ejemplo la "perserverancia", el "entusiasmo", la "pasión" y la "responsabilidad" entre otras.
Y está claro, que cuando actuamos desde estas formas de SER, los obstáculos se disuelven con mayor facilidad y tenemos muchas más posibilidades de lograr nuestros sueños.
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